El territorio de Dënver

por · Julio de 2013

«Todo lo anterior había sido un ensayo», advierte el dúo de Milton Mahan y Mariana Montenegro, que acá adelanta detalles de su nuevo disco Fuera de campo.

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Fuera de campo es la más reciente producción del dúo sanfelipeño Dënver. Un trabajo minucioso de composición donde se pueden ver reflejos e influencias que van desde Angelo Badalamenti a My Bloody Valentine. «Todo lo anterior había sido un ensayo» advierten, en la siguiente conversación, Milton Mahan y Mariana Montenegro, que cuentan detalles —arreglos, grabaciones, lírica— de un disco que mezcla los imaginarios de provincia con la revisión de sonidos pasados.

Fuera de campo, el disco en cuestión, tendrá su lanzamiento oficial este 27 de julio en el Teatro Cariola.

 

Fuera de campo es un disco de largo aliento que me imagino supuso una inversión de diversas energías y recursos. A grandes rasgos, ¿cómo fue el proceso de producción?

Milton: La primera gran diferencia que recuerdo es que todas las composiciones de este disco salieron de un teclado en vez de la guitarra, y eso te condiciona mucho de un principio. Esa alternativa elegida te determina muchas cosas, progresiones muy distintas a las que nacen en la guitarra; yo, que toco muy poco teclado, veo los acordes siempre de manera geométrica y no sé mucho qué es lo que sucede aunque lo intuyo. Pese a mis limitaciones quise hacer un disco muy musical, un disco que evitara las urgencias contemporáneas para trasladarnos al pasado. Así planteamos luego la producción, la instrumentación, los arreglos, la mezcla. En ese sentido queríamos hacer un disco muy racional, dejar muy poco al azar, arreglar y sobre arreglar, yo tenía en mente sonar como Sergio y Estíbaliz, como banda de estelar de televisión de los años 80, bordeando la cursilería y creo que a pesar de que la meta era compleja nos acercamos con dignidad, es el disco que más se parece a lo que siempre quisimos hacer, todo lo anterior había sido un ensayo. Claro hubo una gran inversión además, pero eso es parte también de crear una industria, se siente muy bien el invertir si la experiencia que sacas es provechosa humana y musicalmente.

Dënver2Mariana: Primero teníamos las canciones. Luego, nos pusimos objetivos, entre los cuales estaban, por ejemplo, hacer énfasis en las baterías y arreglos orquestales. Decidimos asesorarnos en estas materias. Fue más cómodo que el proceso de producción del disco anterior, pues esta vez contamos con la comodidad de grabar sin horarios y sin grandes presiones. Las cuerdas las grabamos en México, aprovechando un viaje que tuvimos y fue una gran experiencia que dio muy buenos resultados.

¿Fue muy diferente trabajar sin productor?

Milton: La verdad es que no, en el disco anterior también tuve muchos momentos de soledad como ahora. La mezcla del disco pasado la hice casi en su totalidad, y Cristián Heyne era un guía cuando me encontraba aproblemado. Ahora fue similar, pero también recibí ayuda; estuve con Pablo Muñoz ($990, De Janeiros) trabajando codo a codo, Heyne también colaboró al final, como amigo, en las mezclas; trabajé con Ignacio Soto y Lego para las baterías, con Juan Pablo Ábalo para los arreglos, Mariana también tenía mucho que decir, en ese sentido fue un disco mucho menos solitario que el anterior, menos arbitrario.

¿Los arreglos orquestales de dónde son y cómo se grabaron?

Milton: Son de nosotros. Durante meses nos impregnamos de música muy bien trabajada en arreglos, Mariana además tiene una escuela muy clásica y eso también deja su huella. Yo pensaba en como poder hacer una canción donde la composición fuese de la mano con el arreglo y no una simple melodía pegoteada encima, que para mí es la gran debilidad del Música Gramática Gimnasia (el disco anterior de Dënver). Por ejemplo “I can’t give you anything but my love” de The Stylistics es una gran ejemplo de eso, sentía una deuda con bandas como ellos. Bueno, este es nuestro disco en agradecimiento a esas agrupaciones. Las cuerdas grabadas en el DF salieron muy rápido, ya que los músicos manejaban una técnica increíble, su sonido era un bálsamo que flotaba por el estudio. Los bronces, flautas, arpas y el resto de cosas las grabamos en nuestro estudio y estaba todo bastante claro.

¿Cómo se gestó la colaboración de Cristóbal Briceño para la canción “Concentración de campos”?

Milton: Yo estaba a la mitad de la grabación de Fuera de campo y no podía dejar de oír ese tremendo disco que sacaron los Ases Falsos llamado Juventud americana, y tenía esta canción que requería esta fórmula de dueto, pero debía ser masculino para que tuviese más sentido, y Cristóbal encajaba perfecto. Le envié un correo con la canción y accedió. Tuvimos ahí unas pequeñas disputas, un par de correcciones suyas en la letra, cosa que me costó asimilar, pero lo acepté porque eran críticas en su mayoría constructivas y el resto salió muy rápido, Cristóbal es una bala frente a un micrófono.

Mariana: A mí siempre me ha gustado el trabajo de Cristóbal Briceño. El último disco de Ases Falsos me gustó mucho en especial. Además, la voz de Cristóbal es muy distintiva. Por eso fue la decisión.

Sobre letras, la idea de una guerra, armas y muertos va rondado por todo el disco. ¿De dónde viene eso?, ¿es una metáfora de algo?

Milton: Quise que el hilo conductor del disco fuese una guerra que se desataba en un pequeño pueblo, que puede ser San Felipe o cualquiera de características similares, con un río, una cordillera, centros comerciales, palacios, etc. Me serví de cosas que me rodean para armar una historia que bordeara la ciencia ficción, pero una ficción con un gran gusto por el naturalismo, una especie de realismo mágico “real”, como yo le he llamado en más de una ocasión, algo que nada tiene que ver con lo que haría un García Márquez, la magia no viene a través de un misticismo barato sino de un gusto por la realidad tan crudo que se termina distorsionando, pervirtiendo la realidad. Es, a la vez, un collage de todo lo que nos tocó vivir: conscriptos que desaparecían (el caso de Pedro Soto Tapia), árboles con propiedades magnéticas (Jahuel), las revistas de gimnasia muy decadentes de los colegios; todo encajaba para armar este relato apocalíptico adolescente, solo hay que unir las piezas y hacerlas encajar, leer un poquito el disco además de oírlo. Si es una metáfora o no, yo creo que sí. Es la forma en que se me ocurrió de canalizar toda la fuerza de una energía descontrolada y violenta que sentí al vivir muchos años en mi juventud, no solo mía sino de todo lo que me rodeaba, hay mucha oscuridad y demonios en los pueblos y me interesaba dejar eso como testimonio, espero no haber sido demasiado hermético.

Dënver4Hay una suerte de cartografía íntima, que tiene que ver con ciertos espacios y querencias. Una adherencia emotiva que atraviesa el disco, y quizás en este es más patente que en los anteriores. ¿Tienes esa sensación?, ¿a qué se debe?

Milton: Siempre he escrito cosas muy personales porque sino no me interesa. Eso no quiere decir que no tenga un gusto por la ficción, pero sí necesito partir de algo que sea verídico y luego puedo divagar. Sobre la cartografía íntima, es cierto, está ahí muy patente y creo que hay dos grandes razones: la primera es que me hacen falta ese tipo de cosas en la música actual, creo que intento huir de un discurso globalizado para caer en uno muy localista, regional y rural. La mayoría de los lugares que aparecen en las canciones existen, también los personajes, además del cariño que siento por ellos, creo que es lo que me toca hacer. Es algo que quizás he heredado del cine, así como Woody Allen ha hecho un retrato de Nueva York, su arquitectura, su gente, etc. Yo intento hacer algo parecido con San Felipe. La segunda razón, es que cuando descubrí que tenía todos esos elementos a mano, para armar esos relatos, sentí que había una ficción impresionante que se podía armar, una ficción además con una dualidad muy interesante, ya que funciona por un lado para quienes no conocen nuestra ciudad, pero, para los que se animen a conocerla un poco, puede todo ir cobrando otro sentido.

¿Qué podemos esperar para después del lanzamiento el 27 de julio en el Teatro Cariola?

Milton: No lo sé ni lo quiero pensar. Algún día quiero editar un disco y aislarme por dos años, después volver y recién ahí ver si me animo a empezar a tocar. Fue tanto el tiempo que trabajé en las canciones que ahora pensar en tocarlas se me hace duro, pero eso es porque soy fatalista, pero en el fondo me hago no más, jamás me atrevería a aislarme. Supongo que tocaremos donde nos acepten como somos.

Mariana: Vamos a hacer una gira que abarcará ciudades desde el norte al sur de Chile. Luego, hacer un nuevo videoclip y, finalmente, tocar el disco en el extranjero.

 

 

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El territorio de Dënver

Sobre el autor:

León Álamos

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