Las recomendaciones del editor para esta semana.
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Las recomendaciones del editor para esta semana.
Future days. El krautrock y la construcción de la Alemania moderna (Caja Negra Editora), de David Stubbs. Alemania Occidental después de la Segunda Guerra era un país en estado de shock que había adoptado de manera acrítica el sueño americano como una forma de reprimir la pesadilla del nazismo. Y sin embargo, ese paisaje colonizado cultural y económicamente resultó ser el terreno propicio para una generación de músicos que, estimulados por la revolución psicodélica, las experiencias comunales de los años sesenta y la radicalidad política de las rebeliones juveniles, daría forma a un capítulo único en la historia de la música contemporánea: el krautrock. Al igual que sus pares del Nuevo Cine Alemán, estos pioneros sonoros se propusieron desarrollar un lenguaje propio más allá de las convenciones del rock angloamericano, recurriendo a fuentes tan diversas como el misticismo de Oriente, la música electroacústica de Stockhausen, el arte reparador de Joseph Beuys y la estética moderna de la industria y las serpenteantes autopistas alemanas. Si bien su historia ha sido pocas veces contada, la influencia de grupos como Kraftwerk, Can, Faust y Popol Vuh y de personalidades como Conny Plank, Manuel Göttsching o Klaus Schulze es incalculable. Fueron claves para el desarrollo de movimientos musicales que van desde el postpunk hasta el techno y el ambient, y han inspirado a artistas tan diversos como Sonic Youth, Aphex Twin y Einstürzende Neubauten. Sin olvidar que fue el krautrock el caldo de cultivo a partir del cual David Bowie compuso su célebre trilogía de Berlín. Future Days es un estudio profundo sobre esta meditativa, por momentos abstracta y frecuentemente hermosa música y sobre los grupos que la hicieron posible: un libro ineludible para los amantes del género y la oportunidad, para aquellos que no lo conocen, de descubrir una de las escenas más visionarias y originales de la música del siglo XX. (ref. $25.000)
Los diarios de Emilio Renzi. Años de formación (Anagrama), de Ricardo Piglia. Los lectores de Ricardo Piglia conocen sin duda a Emilio Renzi, escritor y álter ego que aparece y reaparece en sus novelas, en ocasiones fugazmente, en otras con mayor protagonismo. ¿De dónde surge Renzi? De un juego de espejos que arranca del nombre completo del autor: Ricardo Emilio Piglia Renzi. Y ahora lo lleva un paso más allá con estos diarios que publica Piglia y firma Renzi. Tras una espléndida carrera literaria que incluye novelas y cuentos fundamentales de las letras argentinas contemporáneas y varios volúmenes de ensayos igualmente imprescindibles, el autor vuelve la vista atrás y rescata los diarios escritos a lo largo de más de medio siglo, entre 1957 y 2015, a los que se incorporan también algunos relatos y ensayos directamente vinculados con ellos. Este monumental proyecto se publicará en tres volúmenes. Años de formación, el primero, cubre los años que van de 1957 a 1967 y arranca por tanto con un escritor en ciernes que tiene apenas dieciocho años. «¿Cómo se convierte alguien en escritor —o es convertido en escritor—? No es una vocación, a quién se le ocurre, no es una decisión tampoco, se parece más bien a una manía, un hábito, una adicción, si uno deja de hacerlo se siente peor, pero tener que hacerlo es ridículo, y al final se convierte en un modo de vivir (como cualquier otro).» Asoman en estas páginas las primeras lecturas –de Los hijos del capitán Grant de Verne a La peste de Camuso, El oficio de vivir de Pavese, pasando por Defoe, Sterne, De Quincey, Gogol, Dostoievski, Kafka, Proust, Fitzgerald, Faulkner, Hemingway o Gadda—; asoman los cines y las películas que el joven autor devora —de Bergman, Wilder, Visconti, Wajda y Godard, pero también alguna de James Bond—; asoma una geografía —Adrogué, Mar del Plata, Buenos Aires— y asoma, claro, la vida: los amoríos iniciales; los estudios universitarios; los primeros entusiasmos, las primeras rebeldías y los primeros desengaños; los descubrimientos y deslumbramientos vitales y culturales; las rupturas amorosas y los trabajos de cobro incierto —cuando pasa a ejercer de editor free lance después de que la universidad sea intervenida por los militares—; el mundillo cultural de la Argentina de entonces, con la sombra de los gigantes Borges y Cortázar, y los encuentros con Rodolfo Walsh, Haroldo Conti, Edgardo Cozarinsky, Daniel Moyano y el cineasta Leopoldo Torre Nilsson; la creación de los primeros cuentos y el proyecto de una novela. Todo ello anotado minuciosa, compulsiva, apasionadamente en estos diarios escritos por un maestro de la literatura argentina, o acaso por su álter ego. (ref. $24.000)
Escucha la canción del viento y Pinball 1973 (Tusquets), de Haruki Murakami. Después de muchas vueltas, Haruki Murakami ha atendido por fin a las peticiones de sus lectores y ha accedido a que se traduzcan estas dos obras tempranas, que hasta ahora solo habían sido publicadas en japonés e inglés, al tiempo que ha añadido un Prólogo donde relata su génesis. Escucha la canción del viento (1979), ópera prima del autor, sigue las vicisitudes de un joven estudiante que, durante unas vacaciones en su ciudad natal, disfruta de la compañía de su mejor y original amigo, apodado «el Rata», de una chica con cuatro dedos y del barman del Jay’s Bar, personajes a los que se suma la figura de un escritor suicida (e inventado): Derek Heartfield, con quien se abre y se cierra la obra. Tres años después, en Pinball, 1973 (1980), ese mismo joven reside en Tokio, con dos gemelas idénticas, mientras «el Rata» sigue viendo pasar la vida en el Jay’s Bar, en una novela melancólica (con gatos, pozos y antiguas novias) y de atmósfera poética, que contiene las mejores escenas de pinball de la historia de la literatura. (ref. $19.000)
Crónicas del espacio (Crítica), de Neil deGrasse Tyson. La NASA está en un punto crítico: después de décadas de supremacía mundial, canceló su programa de transbordadores, cerrando su acceso al espacio. Hasta 2020, ningún astronauta será lanzado fuera de la órbita terrestre desde suelo estadounidense, y pronto su programa espacial podría ser eclipsado por el de otros países. Con su humor característico y sus provocadoras ideas, Neil deGrasse Tyson, el célebre presentador del programa de televisión Cosmos, ilumina el pasado, el presente y el futuro de la exploración del espacio y nos recuerda de manera brillante por qué la NASA importa más que nunca. Estas crónicas de lectura provocadora y ágil representan lo mejor del pensamiento del autor y reflexionan sobre temas tan diversos como la literatura científica y los tropiezos de las misiones espaciales, brindando una visión del futuro necesaria, clara y, sobre todo, inspiradora. (ref. $11.000)
Todos somos Manuel Gutiérrez (Ediciones B), de Tania Tamayo. «Esa noche el joven gritó ‘me dieron’ y cayó al suelo de espaldas, envuelto en la nebulosa blanca de dos bombas de humo recién lanzadas a la pasarela. Una bala de nueve milímetros, ya deformada en la punta, la ojiva y el costado había entrado en su pecho, ocasionándole una herida torácica mortal y recorriéndolo en dirección de arriba hacia abajo, de izquierda a derecha y de adelante para atrás; dejando en su pecho un orificio de 6,84 por 11,82 milímetros que esbozó paradójicamente un pequeño corazón». En 2011, en plena efervescencia estudiantil, el crimen de un joven llamado Manuel Gutiérrez enlutó al movimiento y remeció al gobierno de Sebastián Piñera. En esta exhaustiva investigación periodística Tania Tamayo reconstruye el conflicto social que provocó la muerte de Manuel y que cobra por estos días muchísima actualidad. Aquí está la eterna rivalidad entre pobladores y carabineros. El rol de las iglesias y de los políticos, cada cual buscando una tajada. Las persecuciones en las villas que alguna vez se levantaron contra la dictadura y que siguen en pie, porque la democracia les llegó a medias. Los cacerolazos. El exceso de fuerza. Las barricadas. El fuego en la calle, como protesta, como espectáculo. Y los disparos, como el que terminó con la vida de Manuel, un rostro anónimo transformado en símbolo. Esta es una historia que parece ficción. Pero no lo es. (ref. $15.000)