Las recomendaciones del editor para esta semana.
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Las recomendaciones del editor para esta semana.
Sudor (Literatura Random House), de Alberto Fuguet. Vertiginoso, salvaje, Sudor es el colosal relato de un editor que describe, con desparpajo y humor corrosivo, el funcionamiento y las relaciones del mundo literario, que se ve convulsionado por la visita y las conductas tiránicas de un autor estrella y su hijo mimado y provocador. Suerte de despiadada sátira a la feria de vanidades que pueden ser las giras de prensa de escritores y sus egos desatados, esta novela es también una indagación sin anestesia en un submundo gay donde los afectos quedan relegados a un segundo plano por el despliegue de una serie de relaciones carnales, efímeras y extremas, propiciadas por Grindr, la exitosa red social de contactos homosexuales que Alf, el editor narrador de esta novela, usa con la misma frecuencia con que sus autores lo utilizan a él como consejero, asesor o cómplice. Entre tanto, la ciudad de Santiago, donde transcurren los pocos días que Sudor relata, cobra una presencia inusitada que raras veces la narrativa chilena ha sabido darle. Una novela tragicómica, estructurada con maestría por la escritura ágil, festiva y electrizante del mejor Fuguet, aquella que lo ha convertido en una referencia de la literatura hispanoamericana. (ref. $18.000)
Prosa deliberada (Ediciones UDP), de Allen Ginsberg. Esta colección de textos es lo más cercano a un extenso manifiesto de Allen Ginsberg, sin duda uno de los escritores más influyentes en la poesía y la cultura popular contemporáneas. El propio autor, para aclarar la naturaleza genérica de las piezas aquí incluidas, propuso la siguiente definición: «Si no fueron compuestas en la lengua, entonces son ensayos». Se reúnen en estas páginas textos de corte autobiográfico, y otros que abordan la historia y la estética de la Generación Beat. Los siguen una nutrida selección de lecturas y semblanzas de escritores, que abarca precursores como William Blake y Walt Whitman, maestros como William Carlos Williams y Kenneth Rexroth, contemporáneos como Gary Snyder, Robert Duncan y John Wieners, compañeros de la Generación Beat, y figuras como Henri Michaux y Jean Genet. Cierran el libro una serie de reflexiones en el contexto de la Guerra Fría, la defensa del LSD que Ginsberg realizó ante el Congreso de Estados Unidos, y un texto visionario en que se propone a la Revolución cubana dar un paso al lado en la guerra materialista y profundizar en la conciencia humana mediante el uso de drogas psicodélicas. (ref. $10.000)
Mis mejores canciones (Lumen), de Patti Smith. Todos tenemos una canción. Llegan así, de repente, expresando alegría o soledad, y sirven para disipar el miedo o celebrar un pequeño triunfo. Casi no nos damos cuenta de que estamos componiéndolas mientras las cantamos, a menudo solos, casi para nosotros. Encontrar la canción que llevamos dentro es lo que nos impulsa a cantar. Puede ser un cántico de alabanza, una chispa de rebelión o una plegaria adolescente. Descubrimos la inspiración donde podemos… En una vieja guitarra arrinconada o en un garaje, debajo de la cama o colgando del escaparate de una casa de empeño. En una frase que nos trae el viento mientras caminamos o en el reflejo de nuestro rostro en un espejo. Esas canciones tan pequeñas hechas de poesía, la actuación improvisada y la colaboración dieron lugar a estas letras, escritas con la esperanza de calar hondo, llegando a alguien que descubra lo que significan en su interior y las cante con nosotros. (ref. $28.000)
Memorias para Cecilia (Lumen), de Armando Uribe. «Este libro es una preparación para el Purgatorio», escribe Armando Uribe en el prólogo a la presente edición revisada de las memorias que publicó hace ya casi quince años. Al decirlo da cuenta del profundo sentido religioso que ha definido toda su obra y su vida, la que aquí rememora desde sus años de infancia y juventud hasta la muerte de su esposa, Cecilia Echeverría, a comienzos del siglo XXI. Se trata de un libro entrañable por varios motivos. No es el menos importante la elegancia concisa de una prosa efectiva a la hora de traer a escena un mundo y un modo de ser chileno que se está perdiendo irrecusablemente. Pero ante todo Memorias para Cecilia es un libro inolvidable porque ofrece el autorretrato intelectual y a la vez sentimental de un poeta, abogado y académico que fue testigo privilegiado de la historia cultural y social del país —y de buena parte del mundo, por sus labores como diplomático a través de los cinco continentes—, y que en todo momento se muestra como un observador implacable de sí mismo, un creyente que descree de sus propias virtudes y que escudriña sin complejos ni autoindulgencia en sus debilidades. (ref. $18.000)
Neverwhere (Roca Editorial), de Neil Gaiman. Neverwhere cuenta la historia de Richard Mayhew, un joven londinense con una vida ordinaria que cambia para siempre cuando se sumerge a través de los intersticios de la realidad en el subsuelo de Londres. Allí existe un mundo desconocido e invisible, plagado de seres extraños, en el que sobrevivir depende de abrir las puertas adecuadas. Porque hay mundos bajo tus pies, espías en las escaleras y formas que esperan al otro lado de los portales, tras leer Neverwhere nunca volverás a pasar por los sombríos lugares del mundo moderno con la misma confianza infantil. Esta nueva edición reconcilia y reinstaura las distintas versiones escritas por Gaiman, y añade varias escenas que habían sido eliminadas. Incluye también una carta a sus lectores en castellano y una novela corta ambientada en el universo de Neverwhere, titulada De cómo el marqués recuperó su abrigo. (ref. $14.000)