Demasiado tarde: vuelve Copano

Cuando salió el primer podcast en 2009, DT era simplemente una conversación entre amigos emulando un vuelo chárter con Just for laugh de fondo. Después de una escala festivalera en Canal 13, la pasada a Internet el verano pasado y un buen menú de invitados y panelistas entre medio, este domingo aterriza Demasiado tarde recargado en VTR.

Conversamos con el Copa sobre esta nueva aventura que lo regresa a la pantalla chica, rodeado de amigos y cosas raras en la maleta.

Nicolás Copano

Demetri Martin decía que la mejor respuesta a un “¿eres cosquilloso?” es otro “tengo diarrea”. ¿Te pone nervioso partir algo nuevo como lo de este domingo?
—Tengo ganas de que ya sea. El proyecto lo preparamos desde marzo, cuando hicimos la versión online de este año del programa y tomé la decisión de irme de Canal 13 para VTR. Volver al cable me tiene muy entusiasmado: desde Canal Copano no pisaba esta plataforma con mucho de Internet y cable. Además el programa lo hago con mis amigos ¿qué mejor? Nervioso no es el término, ansioso es la palabra.

¿Y cómo se están preparando para el estreno?
—A nuestro periodista en práctica, Emilio, se lo violan en La Polar literalmente por haberse comprado un televisor y repactado. Stark fue a las manifestaciones y las vivió en carne propia, tenemos una consola de videojuegos que predice los resultados de Copa América, el videoclip tributo a Camila Vallejo y por si fuera poco Juan Andrés Salfate y Valeria Ortega respondiendo las preguntas de la gente vía twitter y facebook. Además en vivo toca Primavera de Praga. Elegimos a la peor persona del país en un segmento llamado Tarjeta Roja. Y habrá público en el bar donde transmitiremos que es La Junta de Lastarria. Una locura.

Caché que tu equipo es casi completo de provincia. Luc y Stark son viñamarinos. “Willy” Cisternas es de Quillón y así. ¿Hay algo de “Fra Fra” en el casting?
—Fra Fra tiene Twitter y Blog. Creo que va tras nosotros.

Puedes presentarnos a tu equipo que te acomapañará al aire.
—Stark es nuestro Community Manager al aire. Administra los diálogos y selecciona información de los cientos de mensajes. Comencé el programa con él cuando solo era un podcast de audio. Luco es el anunciador del show. Presenta segmentos y opina en momentos tensos desde la barra del bar. Él puede decir lo que quiera. Es nuestro punk en el piso. Leo Piagneri es un genio. Un gran realizador de humor. Hace canciones y sketchs. Talentazo. Emilio es nuestro practicante eterno. Y tiene un problema con el chofer del programa, Juan Tapia, quien se cambió el nombre a John Tape para no ser encontrado por la justicia. Algo esconde, no sabemos qué. El team ChicleClip del gran Roberto Cisternas y NJ López apañan al aire. La señal online la instalan los capos de MediaStream y VTR pone el cable y los espacios. Es un equipo nuclear.

Cuando empezaron con Demasiado tarde, en septiembre del 2009, era un diálogo tuyo con Stark que no tuvo mucho que ver con todo lo que vino después: invitados, la pasada por Canal 13, ahora VTR; y todo desde un podcast disparatado. ¿Qué queda de ese primer viaje en Podcaster, aparte del nombre, claro?
—Queda Stark, quedo yo y la sensación que hoy la gente vieja hace medios para jóvenes (radio, tele) y nosotros estamos en nuestra parada armando una historia en la que nos acompaña mucha gente. Yo ya me rendí con tocar puertas y mostrar resultados en los lugares donde “se supone” que debería estar. Esos lugares se están extinguiendo y son tomados por gente que no quiere madurar una mierda. Y es súper entendible que no deseen evolucionar porque no saben hacer otro paso de baile. Nosotros en cambio estamos preparados para todas y somos más públicos y transparentes. Cuando nos dan en Internet se ve, y cuando nos va bien en Internet también se nota mucho. Entonces ya no hay ilusión, ni siquiera ya esperamos que nos validen. No: tenemos claro a quién le hablamos y por qué le hablamos. Eso es lo que siento como presentador.

Y como productor ejecutivo en tele también queda la consolidación de un modelo: somos una productora de contenidos joven e independiente (el show lo armamos nosotros), cuya credibilidad frente a la audiencia y las marcas es súper buena. Y nos dejan decir lo que quieran. Queremos seguir avanzando. No nos vamos a rendir. Ya no podemos. Antes nos deprimiamos porque nos costaba mucho ir por una nueva temporada, cuando éramos más chicos. Como que decíamos “pucha, nunca nos van a abrir las puertas” y despues nos dimos cuenta que nadie viene y te dice “mira, toma un programa, lo haces bien ahí, vente”. No. Eso sucede despues de años repitiendo lo mismo, cuando se dan cuenta los más viejos que eres capaz de mantenerte en una plataforma largo rato. Repitiendo el mismo paso de baile. Yo me di cuenta haciendo eso en radio: la rutina es un arte. Es lo que te vuelve identificable.

Para los que se olvidan de Internet en el verano, DT tuvo momentos épicos: Briceño delirante repasando “Te he prometido” de Leo Dan, o cuando Salfate predijo el terremoto del año pasado. ¿Recuerdas otras grandes escenas/youtubazos del programa?
—Me acuerdo cuando el Dandy borracho intentó besar a Stark y le decía “eres un homosexual reprimido, eres mi Arenito”. Estaba tan loco esa noche, con los ojos rojos, que al ser expulsado del estudio salió en LUN. Tengo cariño por la sesión de Chinoy, por Sebastián Eyzaguirre protestando contra Raquelita en CQC y rompiendo una silla, por la vez que fue JaJá Calderón quien quería fans en su página pero a cambio fue violentamente trolleado por el público. Todos mis recuerdos de #demasiadotarde son buenos, cuestión que nunca pasó con otros proyectos. Eso me tiene muy feliz.

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¿Qué sacaste al limpio de tu pasada por Alfombra roja de Canal 13?
—Que la farándula es divertida, pero en Chile tiene un problema: son pocos personajes y se repiten hasta la saciedad. Yo llegué a Alfombra Roja cuando era un magazine de cultura pop y espectáculos y eso me acomodó mucho más que su última mutación, a la cual obviamente le va mejor porque es la continuidad vespertina de todos los paneles del día. Es un relato que continúa. A mí me divirtió mucho más siempre comentar desde otra mirada lo que estaba pasando en las calles y vincularlo con fenómenos como Justin Bieber. Era más rupturista y acelerado. Pero fue una gran experiencia por la gente que conocí.

¿Y por qué insistir ahora en el cable (Vive deportes)?
—Porque es libre, porque me dejan producir y quiero seguir aprendiendo. Porque agranda las posibilidades de la productora y me dejan decir lo que quiera para el público y finalmente porque es más cómodo, libre y creativo.

He leído harto trolleo en tus últimas entrevistas en la red. ¿Qué es lo peor que han dicho de ti?
—Que soy pariente de Agustín Edwards y por eso logré escribir en El Mercurio a los 16 años. Jua.

¿Y qué es lo peor de ti que todavía no se dice?
—No sé. Pero te voy a ser honesto: si uno le hace caso a todas las opiniones del mundo se vuelve loco. Y en general los parámetros de quienes nos critican son súper malos: “es fome”. Bueno, ¿por qué buscas que sea divertido un programa de actualidad?. “No deberían darle la oportunidad”. Vamos, en Google hay millones de páginas y en el cable 60 canales, ¿por qué estás atento a lo mío? Yo igual analizo lo que me dicen y soy un ser humano que me importan e incluso a veces me duelen más de la cuenta las cosas (todos somos sensibles) e igual cacho dos cosas: una es que todos piensan que esto es fácil. Y no pos: No es fácil. Nos despertamos temprano, nos acostamos tarde, no solo trabajamos sino que estudiamos varios en el equipo. Hemos optado por cerrar puertas que a veces se traban por leseras como la envidia. Yo no soy un potentado, sino más bien, produzco posibilidades desde el ahorro, el bolsillo y cumplir las expectativas de los que creen directamente en mí. Antes, esquizofrénicamente me googleaba todos los días y leía todos los comentarios y decía “¿y si tienen razón?” y después dije: para ellos, los que hablan de más, nosotros no somos importantes. Somos los que aparecen ahí, nos regalan cosas, nos tratan bien en eventos, nos quiere la gente en la calle y nos cuidan muchas veces gratuitamente extra. Entonces, los entiendo. Los entiendo porque yo también tenía la esperanza de hacer cosas. De emprender. Estoy muy contento de generar pega para gente buena que me rodea, con pasión. Yo no puedo hablarle a alguien que tiene un peinado con gomina sobre un ojo y tiene un nick japonés o para el que cree que es mi par porque estudió algo similar a lo que hago y desea mi puesto. Mis programas no son para ellos. Nada de lo que escribo es para esa gente. Me va bien por eso.

¿Qué es lo mejor de que te sigan 233 mil cuentas de Twitter?
—Que cuando se me queda un cable tipo proyector MacBook para una presentación puedo pedirlo y me llega de alguna oficina vecina (ya me pasó). Además, si voy a un bar solo, siempre termino conversando con alguien vía Foursquare. Digamos que es compañia online rápida, #alocopano.

Del pendejo quinceañero que tuvo que cambiarse de colegio por una columna (aparecida en la Zona) hasta ahora, siempre te he oído muy conectado y crítico de lo que está pasando. ¿En qué crees que deriven las movilizaciones de las últimas semanas?
—Tengo una responsabilidad: si yo soy comunicador, hago menciones y produzco mis espacios, no puedo ser tan tonto de ignorar lo que pasa. Sería cínico y terrible de mi parte. Encima, si me leen en redes sociales 300.000 personas tengo cierta responsabilidad de ser un “medio” y viralizar información útil que genere opinión. Y tengo también mi propia perspectiva. Me parece que tienen ahora que urgentemente derivar en un ítem político real. Tenemos que saber a quién vamos a llevar a las urnas. La creatividad y la genialidad están demostradas. Ahora generemos una respuesta política real. Que le duela en el bolsillo a los que abusan.

¿Qué te molesta de Chile?
—El frío del invierno. El resto de las cosas se han ido reconciliando conmigo.

Ok, para ir cerrando: ¿Cuáles son las coordenadas para ver Demasiado tarde los próximos domingos?
—demasiadotarde.tv a las 19.30. En vivo por internet, todas las compañías de conexión. Es como ver tele abierta. VTR, Vive Deportes a las 21.30, estreno en Cable. Se repite después del late de Julio César Rodríguez en el mismo Canal los Lunes y Martes a la 1 AM.

Me soplaron que DT va a ser con público. ¿Cómo podemos ser parte de esa barra brava?
—Deben conectarse a Facebook y Twitter y estar atentos a las alertas de público. Se inscriben y se sortean los tickets. En el primero, 700 personas se inscribieron. Así que denle no más.

Y para cerrar ¿Por qué ver DT en lugar de CQC, América mía o Tolerancia Cero?
—A ver, CQC ya fue. Yo no podría ver un programa donde la conductora realmente cree que los pobres son pobres por flojos. America Mía es bueno, pero a partir de la segunda media hora de programa, donde justo nosotros terminamos. Tolerancia Cero empieza cada vez más cerca de las 23, así que terminamos nosotros y se van a verlo. Es como cuando nosotros seamos viejos y tengamos autos caros. Allá vamos.