Tras decenas de malas películas, Adam Sandler logró reivindicarse protagonizando Punch-Drunk Love, de Paul Thomas Anderson. Aunque se trata de un filme del 2002, acaba de estrenarse en el catálogo de Netflix.
Tras decenas de malas películas, Adam Sandler logró reivindicarse protagonizando Punch-Drunk Love, de Paul Thomas Anderson. Aunque se trata de un filme del 2002, hemos vuelto a disfrutarlo gracias a Netflix.
Punch-Drunk Love cuenta la historia de Barry Egan (Adam Sandler), un hombre con dificultades para relacionarse, con momentos de ira repentina, y cuya obsesión en un momento termina siendo el buscar las fallas de una promoción de alimentos con las cuales podrá acumular millas de viaje —a pesar de que nunca ha viajado en avión—. En el transcurso de la narración, Egan se verá enfrentado a dos grandes apuros: cómo lidiar con las mujeres que aparecen en su vida, y, sobre todo, cómo manejar su ansiedad. Esto último es lo que nos permite no solo apreciar la mejor actuación de Adam Sandler hasta ahora, sino que funciona como el accionar de buena parte de las escenas de la película.
El filme es una lección magistral de cómo deberían ser las comedias románticas. Un guión inteligente y redondo, ausencia de lugares comunes, presencia de elementos que causan intriga y funcionan como leitmotiv —el «piano» o el «traje azul», por ejemplo—, y la capacidad de no caer en resoluciones utópicas con finales felices imposibles, sino lograr un cierre conmovedor que no parece raro o maravilloso con respecto al resto de la historia. Por supuesto, también está la maestría técnica de Anderson para escoger los mejores planos, así como también mantener el ritmo durante los 95 minutos. De hecho, en ningún momento uno siente que la película decaiga.
No podemos dejar de decir que Paul Thomas Anderson sobresale como uno de los directores de cine más importantes, y originales, que no necesitan de enormes presupuestos para hacer una gran película. Entre otras de sus obras disponibles en Netflix tenemos The Master y There Will Be Blood. Lamentablemente su mejor película, Magnolia, no se encuentra de momento en el catálogo.