Pop, según el evangelio de Fakuta

«Lo siento más socialista (que el rock) porque busca volver a identificarnos como masa, movernos como una masa, tener un espíritu en común como cuando bailamos», dice la autora de Tormenta solar en esta conversación sobre pop, juicios y prejuicios.

Apareció a comienzos de octubre como un viral de libre descarga, pero recién ahora Tormenta solar, el segundo disco de estudio de Fakuta, será presentado en vivo en el Cine Arte Normandie. Ese espacio que en los últimos años ha aumentado su cuota de participación en la historia de la música chilena reciente. Allí se lanzaron discos como Cripta y vida (2011), de Pedropiedra; Muérdete la lengua (2007), de Francisca Valenzuela; y Hungría (2007), de Gepe. Allí la cantante de “Aeropuerto” y “Guerra con las cosas” escribirá su propia página acompañada por los músicos invitados Javier Barría, Felicia Morales y Christiane Drapela, además de Gepe, Cristóbal Briceño y Coiffeur, y su propia banda formada por DeMentira, Deplasticoverde y Zota.

Bajo el escenario, Fakuta es Pamela Sepúlveda, que de un tiempo a esta parte dejó su trabajo como arquitecto para dedicarse de lleno a su álter ego musical: «opté por la felicidad no por la estabilidad». Sobre él, su sonido es un suave pop de sintetizadores que descubrió en sus acercamientos de infancia con el género («Radio Aurora, Laura Pausini»): «El pop lo siento más socialista (que el rock) porque busca volver a identificarnos como masa, movernos como una masa, tener un espíritu en común como cuando bailamos», dice en esta conversación con la urgencia de whatsapp.