Nuevo destino, el debut literario de Phil Klay, es un conjunto de cuentos donde aparece lo que realmente hace la guerra con las personas que se ofrecen para pelearlas.
Nuevo destino se llama el primer volumen de cuentos de Phil Klay, un ex marine estadounidense que estuvo en la guerra de Irak y que regresó para escribir lo que vivió, pero también lo que vivieron otros. Se trata de doce relatos que en el conjunto pueden verse como una gran novela sobre la guerra moderna. Sobre todo por el tono directo y crudo, siempre en primera persona, que deja una sensación de inestabilidad después de pasearse por doce narradores distintos y con experiencias muy diferentes, como capítulos sueltos pero al mismo tiempo amarrados por la visión del combatiente. Personajes distintos entre sí pero con un sentimiento parecido: el soldado en el campo de batalla con sus sentidos calibrados para notar la presencia de una moneda a veinte metros de distancia, la mente de los marines que regresan y son atrapados por sus recuerdos; las mujeres que no esperaron y los hombres que no volvieron; el soldado desbordado por la incomprensión del horror; la sensación de matar por primera vez y otras formas del pánico; los sentimientos que aparecen cuando se comparten los días y los meses y luego los años con un grupo de personas asignadas a cuidarte la espalda y que se exponen tanto como tú a la muerte. A diario, a cada minuto.
Lo interesante de esta galería de la naturaleza humana es el punto de vista, la sensación de ver y sentir, desde la cámara que llevan algunos marines en sus cascos, el estruendo al derribar una puerta, el sonido de las balas enemigas o los segundos en que hieren a un aliado. Una imagen que persigue a los soldados en momentos de descanso, cuando su nivel de alerta por fin baja. Este libro, de hecho, nació en esos momentos, cuando Klay tomaba apuntes oculto en la barraca de su unidad.
Lo que vio es una vitrina más o menos amplia y sorprendente: los soldados que cuando no llevan un fusil en sus manos no saben qué hacer con ellas. La imagen de un perro bebiendo la sangre de un muerto como si fuera una poza de agua. Los que espían a las mujeres a través de sus miras. Los que comparten muñecas inflables por la desesperación. Todas esas personas llenas de tecnología para matar van tensionando la escritura de Klay, siempre con el murmullo de la guerra encima, entre heridos que entran y salen de las bases estadounidenses, los caminos marcados por morteros y la música de las balas en el aire; llevándonos irremediablemente a la abulia que siente un soldado cuando regresa a su vida de civil: a sus esposas, a sus novias, a sus calles, a ese momento en que se estrella de frente con su vida anterior y aparece eso que realmente hace la guerra con las personas que se ofrecen para pelearlas.
Nuevo destino
Phil Klay
Literatura Random House, 2015
275 p. — Ref. $14.000