Catalizador de estilos y eyaculador de proyectos tan disímiles como interesantes, Pedropiedra está hoy entregado al esperadísimo Cripta y vida. El álbum sucesor de su trabajo homónimo lanzado a fines de 2008, registrado en el DF y arreglado por estos días en Santiago. Lo nuevo del ex CHC aparece en abril de 2011, según él […]
Catalizador de estilos y eyaculador de proyectos tan disímiles como interesantes, Pedropiedra está hoy entregado al esperadísimo Cripta y vida. El álbum sucesor de su trabajo homónimo lanzado a fines de 2008, registrado en el DF y arreglado por estos días en Santiago.
Lo nuevo del ex CHC aparece en abril de 2011, según él mismo y la gente de Quemasucabeza, su nueva casa discográfica. Acá, algunas postales de su presentación en la reciente Pulsar y un tema inédito a dúo con Gepe, a días de que se suba a la gira de Jorge González que revisa en vivo el disco La voz de los 80.
Pedro Subercaseaux lleva más de una década apuntando hacia el pop. Acumulando millas entre giras y grabaciones, como baterista o guitarrista, y como rimador o cantante, aunque esencialmente como productor.
Por estos días, y desde hace un buen rato, tiene sonando sobre distintos escenarios las trece canciones de su primer disco, enhebrando un cancionero reconocible. Desde el humo de pequeños clubes hasta probarse como banda en mega festivales.
¿Qué evaluación hacís de Maquinaria, donde te presentaste con formación estelar hace poco?
—Es una evaluación positiva, bajo el punto de vista de que toda la gente que compró su entrada para Maquinaria pagó cero para ver a Pedropiedra, que es un show que se puede ver por mucha menos plata y más seguido, y aún así, como estábamos tocando antes de que llegara nadie a tocar, toda la gente se juntó ahí, con nosotros. Algunos que conocían las canciones y muchos que no. Y sentí como una buena respuesta, aunque tenía un poco de miedo de que los metaleros me tiraran tomates o ratones. No estoy tan acostumbrado a tocar en escenarios así de grandes (Club Hípico), donde los músicos están a cinco metros de distancia entre cada uno, pero la evaluación es totalmente positiva.
Hace tiempo que Federico Dannemann aparece como guitarrista en tus presentaciones en vivo. ¿Es miembro estable de la banda?
—Hace rato. Grabó en el segundo disco y estamos tocando siempre que podemos con él.
Dannemann es el mismo que a los 16 años ya tocaba los solos de La Rue Morgue, hoy presentado como el ex guitarrista de Pedro Aznar y referente dentro del circuito de clubes de jazz santiaguinos con su banda Federico Dannemann Trío o en la orquesta Ensamble Quintessence, aunque antes ya había rozado la pista de baile con el actual bajista de Pedropiedra, Jorge Del Campo, en ese notable proyecto de electrofunk conocido como La Jungla, junto- además- al primer productor de Tiro de Gracia, Pato Adonai y al bajista de C-Funk, Chicho Espinoza.
Otro invitado recurrente en sus shows en vivo es el nuevo batero e integrante de Uruz, Cristóbal Tobar, mucho más plástico y mejor cohesionado que Gepe sobre el sillín. Complementando a Del Campo en el bajo y al tecladista Michel Maluje, que arregla y despeina las canciones, que en Pulsar sumaron diez en total, en poco más de cuarenta minutos.
A la nueva “Oh” siguieron “Al vacío“, “El ring“, “Yo no quiero“, “Mi mamá“, “Las niñas quieren“, “Inteligencia dormida“, “Sol mayor“, “Si somos salvajes” y el cierre con “Cuarto oscuro“. Acá un botón:
Pedropiedra está enfocado en su nuevo disco, aunque eso no impida que colabore en proyectos paralelos, como este cóver registrado a dúo con Gepe. La versión para “Maestro distorsión” de Astro:
En Quemasucabeza me soplaron que tu nuevo disco aparece en abril del próximo año. ¿Qué nos puedes adelantar?
—Sí, el disco se llama “Cripta y vida” y trae nueve temas que fueron grabados mitad México y mitad acá en Santiago. La música la grabamos allá y los arreglos y las voces las estoy trabajando en la casa. Ahora lo está mezclando un ingeniero y va a estar listo a finales de diciembre, pero se toma un tiempo entre que está listo y sale, que va a ser tipo marzo-abril.
Por mientras, Pedropiedra recorre Temuco, Valdivia y Puerto Montt, en diciembre, y finalmente Santiago durante enero, para presentar en vivo La voz de los 80. El álbum debut de Los Prisioneros, que será interpretado completamente en vivo junto a Gonzalo Yáñez y, claro, el emblemático padre del rock chileno: Jorge González, al frente.
