Julian Casablancas: Kermesse

por · Marzo de 2014

Fotos y comentario del sideshow del líder de The Strokes en Club de La Unión.

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He visto tres presentaciones malas en mi vida: la número tres fue Claudio Narea en una sala de eventos para oficina. La segunda fue en mi colegio, donde con unos compañeros nos presentamos representando al IVºA y tocamos como las hueas. La ganadora del primer lugar fue Julian Casablancas en el Club de la Unión.

Mentira, mis compañeros y yo fuimos mucho peor, pero esto lo escribo mientras me zumba un oído y leo las mismas quejas que tengo yo en Twitter.

Antes de seguir con cualquier ironía, comentario sarcástico o chiste obvio hay que dejar claro un punto: lo que pasó con Julian Casablancas es impresentable. Nadie puede cobrar más de $40.000 por lo que ocurrió ahí. Quizás las expectativas jugaron en contra: Casablancas, que tiene un buen repertorio (sea en solitario o con los Strokes) cantando para pocas personas en un club para caballeros. Un amigo preguntó si había dress code. Lo dudé por un momento y hasta me pareció legítimo que lo hubiese. Pero todo quedó en eso, expectativas.

Casablancas

Así como algunos shows —Pixies— salieron adelantados, otros —este— se tomaron más del tiempo estipulado para realizarse. Una hora de atraso para que el señor Casablancas saliera al escenario y se diera cuenta, al igual que el resto de los que estaban ahí, que las pruebas de sonido —si las hubo— fueron un fiasco. No solo sonaba destemplado, además todo se sobreponía a la voz de Casablancas. ¿A qué se parecía? A una tocata de colegio, a una kermesse organizada a última hora. A que la choreza estaba en sacarle fotos a Casablancas en el Club y nada más.

A los 10 minutos de la presentación, no solo hubo problemas con el audio, el escenario tuvo problemas también, por lo que se detuvo todo. Otros 10 minutos pasaron en los que Casablancas rellenó diciendo cosas ininteligibles. Quizás decía “pico, teta, poto” y nadie hubiese entendido. A esa altura ya no importaba. Ni siquiera los sonidistas tenían cara de querer seguir esforzándose, se había ido todo al carajo. Con el sonido tan como las pelotas es difícil criticar la puesta en escena o las canciones. Es injusto. Sin embargo, lo que sí es realmente injusto es que un show como ese, con una precariedad tan evidente, tenga un valor tan inflado.

Ah, bueno, no todo fue tan terrible: “11th Dimension” sonó aceptable.

 

Setlist:
Ego
2231
Ize of the World (The Strokes)
Instant Crush (Daft Punk)
Biz Dog
Glass
Dare I Care
River of Brakelights
Take It or Leave It (The Strokes)
11th Dimension
Father of Electricity
Dr. Acula

Julian Casablancas: Kermesse

Sobre el autor:

Mariano Tacchi (@playeroycasual)

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