Cuidado con quemarte con este mensaje

por · Marzo de 2016

Movimiento Original en Lollapalooza.

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UNO. Echando mano a la mezcla de rap y reggae, Movimiento Original encontró la fórmula para ganarse al público festivalero. En su segunda presentación en Lollapalooza, el trío de Pudahuel se rodeó de cientos de preadolescentes levantando tierra a cielo abierto. «En Latinoamérica, el hip hop chileno es el más influyente», dijo hace poco Dacel, el DJ de Ana Tijoux y Hordatoj en un programa de televisión. De vuelta en el festival, la imagen es elocuente en los coros de “Luz”, “Valle central” y sobre todo “Natural”: los raperos chilenos doblan en visitas en YouTube a los artistas pop. Y esos números fríos se notan en la convocatoria, al calor del karaoke colectivo y en la vibración que atraviesa el suelo cada vez que hay que saltar. Tal vez por eso la aparición de WH y sobre todo de Portavoz, presentado como uno de los más grandes del rap chileno («cárcel pa’ los políticos corruptos», saludó él), resultó explosiva:

Con Portavoz entre sus filas Movimiento Original hace “Cotidiano” y esa especie de himno reivindicativo que es “El otro Chile”, el primer gran momento del sábado, una canción representativa de los barrios modestos, con escuelas numeradas y esa cultura donde las cosas se comparten y también se ve como viven los demás. «El hip hop es la forma que encontramos para comunicar y decir las cosas que pensamos, sobre todo acá en Chile donde los medios de comunicación están en manos de unos pocos grupos económicos, de unas pocas familias, el rap se transforma en eso, en una herramienta de comunicación», dijo el MC a las cámaras del programa Puro Chile. «Aylwin, Frei, Lagos, Piñera y Bachelet / títeres del empresario igual que Pinochet / la misma minoría que nos explota y que nos miente / la misma burguesía que es la clase dirigente», improvisa Portavoz en el escenario de Lollapalooza. Es curioso, por decirlo de alguna forma, que después de lo hecho por Movimiento Original en 2014, o el mismo Portavoz el año pasado, ningún medio masivo lleve una reseña que hable de este grupo, ni de su arrastre, ni menos de sus canciones.

DOS. Las letras que Movimiento Original dispara con Portavoz son crudas, directas y llevan nombres y apellidos. Siguen la tradición de una banda primitiva como Panteras Negras y títulos como Soldados del ghetto, el primero de sus tres discos, el mismo que Black Eyed Peas escuchó para confirmarlos como sus teloneros en 2010. Ahora, cuando el trío se aleja de la protesta, aparece el reggae. Y le cantan al amor. Y no tienen problemas en escribir canciones para una organización como Techo (“La voz de la unidad”). Ahí es importante entender la dinámica del grupo, que opera sobre las secuencias y mezclas de DJ Acres, la rima de Aerstame y la queja raggamuffin de Stailok, que lleva un parche que dice «Jah army» y es una especie de todoterreno en el ambiente rapero: es la otra mitad de “El otro Chile” y uno de los integrantes de Movimiento Original con mejores colaboraciones en el circuito: ha escrito, entre otros, con Salvaje Decibel, Semillah y La Habitación del Pánico.

TRES. Si el reggae parece ser el género llamado a reinventarse, al menos desde las audiencias más jóvenes del festival, ya sea en su versión mestiza con Todos Tus Muertos, o con esteroides, como en algunos pasajes de Jack Ü y los números del Arena, qué mejor que hacer “Un poquito de ti” con alguien como Quique Neira, que ocupó el escenario para cantar el cumpleaños feliz a su hija. Ya para ir cerrando, a pesar del horario y la escasa cobertura, Movimiento Original confirmó sus credenciales como número de festivales y respondió a la altura del montón de gente que gastaba su primera cuota de energía en el mismo escenario de Eminem.

Movimiento Original

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Sobre el autor:

Alejandro Jofré (@rebobinars) es periodista y editor de paniko.cl.

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