Habla el creador de Lollapalooza
En el contexto de Lollapalooza Chile, se lanzó la campaña “Cultura Verde” para promover el cuidado del medio ambiente y que reunió hoy, en conferencia, a Perry Farrell, el Ministro de Cultura Cruz-Coke, entre otros rostros con el fin de dejar limpiecito el Parque O’Higgins tras el festival. Conversamos con el líder de Jane’s Addiction.
// Fotos: Andrés Larraín
El escenario era una improvisada mesa en el pasto. Un cartel con un arbolito verde hippie y, de fondo, las gigantes montañas rusas de Fantasilandia. El día está fresco y soleado y Perry Farrell, espera sonriente a las autoridades que vienen con un lígero y chilenísimo atraso a la reunión.Llega Luciano Cruz-Coke. Se saludan con Farrell. Buena onda y enjambre de colegas sapeando, tirando fotitos, apretando el rojo. Está de cumpleaños el líder de Jane’s Addiction. Son 53 pepas. En un rato más confidenciaría que la cifra lo tenía deprimido hasta que un amigo chileno, parte de la organización del Lollapalooza, le embolinó la perdíz con que el número 53 en el calendario maya era reimportante. Que significaba el cierre de un ciclo. Personalmente me da la impresión que un chantamán maya puede tratar de engrupirte con cualquier número.
Pero, la cosa es así. Se cumplen 20 años de Lollapalooza. Es el primero en Chile y el enfoque que están tratando de darle es absolutamente verde. “Hace 20 años, cuando empezamos esto, partimos con un par de mesitas y sillas entregando volantes sobre la defensa de las ballenas, los delfines, y todo eso. Hoy en día es toda una industria ecológica”, aclara Farrell.
Cruz-Coke le agrega un poco más de bla blá al asunto ecológico. Habla de reciclaje. El alcalde Zalaquett fiel a su nervioso estilo enumera la cantidad de gente que va barrer y los camiones de basura dispuestos.
Básicamente, acá hay una diferencia esencial. Mientras a Farrell y compañía le interesa la noble causa de proteger el planeta completo, para nuestras autoridades la misión parece ser bastante más aterrizada. Pero no por eso menos ambiciosa: evitar que quede la pura zorra en el Parque O’Higgins.
Ante la pregunta de si ya está más o menos cocinado quiénes serán las bandas chilenas que partirán a Chicago a la versión gringa, Farrell se sacó los pillos y declinó responder. Sí soltó que serán al menos 3.
La conferencia termina con una tímida y bizarra interpretación del happy birthday por parte del Ministro de Cultura a Farrell. Guitarra en mano, cortesía de CQC.
Luego de esto, nos colamos a conversar con el maestro de ceremonia. Perry Farrel.
Hablando de lo verde del festival. Es como el escenario ideal para fumarse unos pitos y ver los grupos, ¿no?
—Ja ja ja ja (mira a ver si siguen las autoridades cerca. No están. Se relaja). Mira, en realidad, yo encuentro que no hay absolutamente nada de malo en fumar marihuana, está comprobado que lo más que te puede pasar es que te de un poco o harta hambre después.
¿Cuál es tu posición respecto al tema de la legalización? Acá la ley es súper brígida contra los consumidores.
—Mira, la verdad no conozco en profundidad como será acá. En los 50, mi hermano mayor se fue en cana harto rato por un par de pitos. En Estados Unidos ahora ya puedes comprar legalmente, si es para asuntos medicinales, que es un tema que ha avanzado mucho. Y en la calle, el acceso es harto más facil que antes. Me tinca que acá debe ser así también. En todo caso, creo que lo mejor es tener una mata en la casa. Le da una decoración aromática especial al hogar, y además que el cariño que uno le da al cuidado, no sé, es casi como una mascota.
Así es. Muchas gracias. Que tengas un muy feliz cumpleaños.
—Gracias, igual que quede claro que no se me ocurriría fumarme un pito en la calle acá, en Santiago…
No poh. Ni loco. Pero en privado demás que sí.
—Ja ja ja… Claro, pero eso ya es asunto mío.